Tu cuerpo es eléctrico y funciona con electrones! :: 1ª Parte ::
Tu cuerpo es eléctrico y funciona con electrones! :: 1ª Parte ::
Artículo del Dr. Robert O. Young
Cada movimiento que realizamos depende de nuestra respiración, de lo que bebemos y comemos, ya que nuestro movimiento está impulsado por energía eléctrica que almacenamos en el cuerpo. Recibimos nuestra energía de las tres fuentes principales: del aire, de los alimentos y del agua.
La energía eléctrica no aparece así sin más del aire que respiramos, de la comida o del agua que ingerimos. En su forma habitual no es químicamente biodisponible. Esta energía no siempre está disponible para poder sostener cada movimiento que hacemos ya que muchas veces no está lista para generar una reacción química. Para que se de cualquier reacción química es necesario la presencia de dos moléculas, y cada una de estas moléculas debe tener algo que “intercambiar” en forma de átomos compatibles que ya bien estén cargados positivamente o negativamente. Las moléculas cargadas positivamente (y los átomos que contiene) se unirán fácilmente y de manera natural con las moléculas cargadas negativamente con carga equivalente y compatible.
Dicho de manera sencilla, todas tus funciones corporales dependen de la energía eléctrica generada por la unidad de la “carga” contenida en las moléculas y la “carga” opuesta que entra a través de la comida, el agua y el aire. Por lo tanto, ¿qué es un ion?
| Ion Positivo: Es un átomo (o molécula) que ha perdido uno o más electrones debido a un impacto energético elevado. Las fuerzas naturales que generan iones positivos incluyen la descomposición de minerales radioactivos, gas radón, incendios forestales, relámpagos y rayos ultravioletas. |
| Ion Negativo: Es un átomo (o molécula) que ha ganado uno o más electrones extra cargados negativamente. Los iones negativos se generan de manera natural con la evaporación del agua. |
Un ión es cualquier átomo que tenga una carga positiva o negativa. Un ión cargado positivamente buscará uno que esté cargado negativamente para unirse a él y tener un “acoplamiento” glorioso transformándose en algo completamente nuevo y disponible.
¿Así que, por qué alabamos tanto los iones negativos?
Porque el resultado de cada movimiento que realizas (una red que consume energía eléctrica) es un cuerpo cargado positivamente. Las moléculas en tu cuerpo se quedan con una carga positiva. Y estos iones no están disponibles para futuros “acoples” a menos que consigamos rápidamente un buen lote de atractivos iones negativos dispuestos a dar energía.
Actualmente se oye mucho decir que las cosas ya no son lo que eran. El aire es diferente, etc. Siendo muy franco y poco científico se podría decir que está lleno de mierda o ácido. Los iones cargados positivamente son mierda ácida. Nada desaparece en nuestro pequeño planeta verde y todo lo que sueltan los tubos de escape, el humo de las chimeneas de las fábricas, los gases que se liberan en el aire perdura en nuestra frágil y delgada ionosfera. Permanece en el aire que tragamos cuando corremos por la playa, permanece en el agua que bebemos y en la comida que comemos. Y toda esta contaminación ácida o iones positivos son inservibles para producir energía dentro del cuerpo.
El aire que respiramos en nuestro jardín sólo a 500 metros de la playa contiene alrededor de 150 iones negativos/cc/segundo. Pero también contiene unos 700 iones positivos. Esto significa que aunque estemos tumbados en la playa sin hacer nada, nuestros cuerpos se quedan cortos por 2000 (los necesarios), más 700 iones positivos y menos 150 iones negativos = 2550 iones/cc/segundo.
Niveles de Iones Negativos y Positivos Medidos en varias Localizaciones
| Lugares | Iones Negativos | Iones Positivos |
| Oficinas | 70 | 1,400 |
| Áreas Industriales | 50 | 300 |
| Centros Comerciales | 220 | 280 |
| Áreas Residenciales | 200 | 180 |
| Bosques | 2,500 | 800 |
| Aguas Termales Calientes de Kowakidani | 2,500 | 820 |
| Cataratas cerca de Minoh | 5,000 | 300 |
(Estas mediciones fueron tomadas en Japón)
En algunas oficinas dónde hay muchos terminales de ordenador se detectó que no había iones negativos en absoluto. Dentro de las típicas residencias en Tokio se encontró que los iones positivos eran 500 veces más numerosos que los iones negativos. Estos resultados pueden deberse a una inadecuada ventilación tanto en los edificios de oficinas como en los hogares energéticamente eficientes, al igual que por el uso de dispositivos electrónicos que generan un campo electromagnético y por los materiales de los edificios que emiten formaldehido y otros gases tóxicos.
Por otro lado, los niveles elevados de iones negativos, como los generados por cataratas, aguas termales y otras áreas altamente hidratadas, neutralizarían los iones positivos haciendo que los niveles de iones positivos fuesen bajos. En cualquier caso, estas mediciones sugieren que en la actualidad es muy difícil mantener los niveles adecuados de iones negativos.
Debido a que nuestro medio ambiente ya no nos puede proporcionar los iones negativos básicos, nuestros cuerpos tienen que ionizar negativamente el aire, el agua y la comida que entra en nuestro cuerpo para poder obtener el mínimo de iones negativos necesarios, y ahí tumbados al sol, nuestro organismo está trabajando sin parar para conseguir la suficiente energía eléctrica disponible simplemente para poder levantarse de la arena y andar hacía el coche.
¿Tuvimos siempre que hacer esto? ¡No!
Hemos conseguido transformar nuestro precioso planeta de un jardín paradisiaco a un mundo tecnológico lleno de basura ácida en menos de un siglo, y lo hemos hecho muy, pero que “muy bien.” Hubo una época en que el aire puro que respirábamos y el agua de los manantiales o glaciares que bebíamos nos aportaba todos los iones cargados negativamente que necesitábamos, en la actualidad estos mismos elementos básicos nos roban energía.
¿Te apetece la idea de beber agua alcalina pura de lluvia? ¡Ni se te ocurra! Te roba electrones negativos del cuerpo. También es acidificante ya que se ha combinado con CO2 y otras sustancias contaminantes a medida que cae del cielo, contribuyendo únicamente a acidificar aún más el cuerpo.
¿Te apetece ir a la playa y revitalizarte con el aire puro del mar? Ese aire vino directamente de la fábrica química de Brasil y ahora te toca a ti respirarlo. Así que nos estamos ahogando en nuestro propio aire, deshidratándonos con nuestra agua, e intoxicándonos con nuestra comida supuestamente tan higiénica de los supermercados.
En una situación tan radical se precisa tomar medidas drásticas, y desde luego, nos hallamos en una situación de supervivencia corporal de emergencia. Hemos perdido los electrones negativos, la energía eléctrica viva que necesitamos para poder respirar libremente.
No es difícil de entender por qué envejecemos de la manera que lo hacemos. De repente ya somos viejos y nos preguntamos cómo ha ocurrido. Pues sí, ha estado ocurriendo durante años porque nuestros maravillosos e increíbles cuerpos han estado luchando y perdiendo la batalla, para mantener su diseño alcalino y evitar la vejez.
En vez de llevar a cabo simplemente sus funciones de limpieza diaria, el cuerpo invierte toda su energía en ionizar el agua, la comida y el aire que respira para que la energía esté disponible y pueda almacenarse.
Los expertos en medicina China conocen muy bien el poder de este proceso de ionización negativa. Llaman a esta energía corporal el Qi y dicen que proviene de aire que respiramos, del agua y los alimentos que ingerimos. En su libro “El Tao de la Salud, el Sexo y la Longevidad” el autor y experto en longevidad Daniel Reid dice; ´Puesto que no existe ningún término en inglés para Qi o Prana, nos vamos a referir a él como energía “biónica” o “bioeléctrica”. Esto combina la idea de energía viva con organismos vivos (bio-) y con electricidad (-eléctrico) e iones cargados negativamente (iónico).
En 1836, Christoph Wilhelm Hufeland escribió en su libro “El Arte de Prolongar la Vida del Hombre” un estudio detallado sobre el fenómeno de la fuerza vital en un mundo organizado reconociendo en él las siguientes características y leyes:
“la fuerza vital es el agente más sutil, más penetrante y más invisible que hayamos conocido hasta ahora en la naturaleza; con respecto a esto podría decirse que supera incluso a la luz, a la electricidad y al magnetismo, con lo que en otros aspectos parece que tiene la mayor analogía…
Encontramos una similitud sorprendente entre la fuerza vital y el magnetismo. La fuerza vital puede existir en un estado latente y libre, y en este sentido tiene una similitud cercana al calor y a la electricidad.”
Más recientemente, el científico francés Dr. J. Belot afirmó,
“Cuando contemplamos la vida orgánica bajo la luz de la biofísica, encontramos que los fenómenos eléctricos se hallan en la raíz de toda vida celular y concluimos que el final de todo es una descarga eléctrica”.
En marzo de 1968, hace 44 años, el periódico Le Monde publicó que la presencia de iones negativos o la ionización facilitan la absorción de oxígeno en los pulmones, ayudando a eliminar el CO2 de los alveolos pulmonares, y que los iones positivos producen precisamente el efecto opuesto.
Los gases, el polvo, los humos químicos, los alimentos acidificantes como las carnes, lácteos, frutas con alto contenido en fructosa, los granos, el café, las bebidas de cola, el té, el vinagre, el alcohol, etc., penetran todos ellos en el organismo como iones cargados positivamente, atrapando los diminutos iones negativos debido a su gran capacidad de absorción, y convirtiendo técnicamente el aire en algo ´muerto´.
Cuando leemos el trabajo del Dr. Otto Warburg, Científico galardonado con un premio Nobel, comenzamos a entender no sólo la gran importancia del oxígeno ionizante alcalino, el sodio, el hidrógeno y el nitrógeno, sino también la absoluta importancia para nuestra longevidad que estos elementos entren en nuestro cuerpo en una forma cargada negativamente.Asimismo, comenzamos a ver la gravedad de los efectos por el uso de sustancias comunes. Un silla de plástico acelerará la fatiga mental, al igual que lo hará una pared o una cubierta de plástico. Los objetos que están cubiertos con polietileno producen un campo de entre 5 y 10,000 volts/metro.
En un espacio rodeado de polietileno el nivel se dispara a 100,000 voltios/metro. Ciertas ropas sintéticas son lo suficientemente potentes como para generar a tu alrededor un campo que repele todo ión negativo. Ve a la montaña, tampoco te ayudará mucho si llevas tu chaqueta de plumón favorita o zapatos sintéticos de plástico.
En cualquier caso, estas mediciones sugieren que en la actualidad es difícil mantener los suficientes niveles de iones negativos.
Cómo afectan a nuestros cuerpos los Iones Positivos y Negativos.
| Sistemas | Iones Negativos | Iones Positivos |
| Sistema arterial y venoso | Dilata Arterias y venas | Constriñe arterias y venas |
| Presión Arterial | Estabiliza Tensión Arterial | Aumenta Tensión Arterial |
| Sangre | Aumenta alcalinidad sanguínea | Aumenta acidez sanguínea |
| Huesos | Fortalece huesos | Debilita huesos |
| Tracto Urinario | Promueve orinar; aumenta nitrógeno en orina | Suprime orinar; disminuye nitrógeno en orina |
| Aparato respiratorio | Estabiliza y facilita la respiración | Acelera y dificulta la respiración |
| Pulso | Disminuye el pulso | Aumenta el pulso |
| Corazón | Mejora la función cardiaca | Deteriora la función cardiaca |
| Fatiga | Aumenta la velocidad de recuperación física | Velocidad de recuperación física menor |
| Sistema nervioso autónomo | Nervios calmados y relajados | Sistema nervioso tenso y estresado |
| Crecimiento | Promociona crecimiento saludable | Frena y retrasa el crecimiento |
FUENTE: BLOG ALKALINE CARE
